Los amantes del verano deben decidir qué buscan de las playas: ser cool y broncearse como Paulina Rubio (aunque ella usa bronceado artificial eh, no se dejen engañar) o tomar las precauciones necesarias y enjabonarse el cuerpo del venido a menos protector solar. La tercera opción es no echarse nada encima. Y la cuarta es que te claven la sombrilla por cinco maracas.
Desde que era casto, en un campamento por el Norte Chico, tomé la decisión de no broncearme nunca más, de nunca estar marrón o “camaroncito” como dicen. Me conmueve ver a esos seres humanos de pieles rojas que uno ya no puede palmear al saludar: reaccionará como si le desencajaras un hueso.
Tratando de entender a los bronceados, una amiga de pechos congraciados con la abundancia me dijo que son personas que gustan de vivir el momento y la aventura, no piensan en el futuro y no se dejan frenar por la publicidad cancerígena. Sigo pensando que abusan de su suerte. Aunque ellos pueden pensar que soy un viejo calvo que odia quemarse la pelada.
Desde donde estés, con sol o sin él, sintonízanos y participa del tema: ¿BRONCEADOR O BLOQUEADOR? Cuéntanos, ingenuo veraneante, tu elección este JUEVES de 7 a 9 pm. Por Solo Ritmo
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3 comentarios:
Yo pertenezco a una opción remix: Prefiero el bloqueador en el rostro, el bronceador en las piernas, pecho y espalda, dejar al aire libre el trasero y clavarle a alguien la sombrilla.
Ay obviamente que bronceador puess si no no tendria sentido el veranooo! =P
Q ONDA XICOS XQ NO TRANSMITIERON
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